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Cuando el Presidente López Obrador por recomendación de Manuel Bartlett, director de Comisión Federal de Electricidad, calificó como leoninos los contratos firmados con el gobierno anterior por parte de las compañías proveedoras de gas extranjeras y las de transportación nacionales, se habló de renegociarlos bajo nuevos términos menos desventajosos.

En tanto eso ocurriera, se decidió detener la puesta en marcha del gasoducto Texas-Tuxpan ya listo para operar, el cual conduciría el gas necesario para la operación de las plantas de generación de energía eléctrica de estados del sur de la república, los cuales de no operar provocarían eventualmente un desabasto en el suministro energético para esas entidades.

En su entrevista con Proceso, el ex secretario de hacienda, carlos Urzua, quien renunciara con breve, sorpresiva y consisa carta pública por diferencias de visión con el Presidente y algunos de sus acompañantes políticos, advirtió que esto era un error y no fué escuchado, sino más bien segregado por su "rebeldía" y entendió bien y rápidamente el mensaje.

El día de ayer pudimos ver al presidente acompañado de los principales hombres de negocios mexicanos involucrados en estos contratos, acuerpados en el Consejo Coordinador empresarial y el Consejo Mexicano de hombres de Negocios, destacando entre ellos Carlos Slim y Carlos Salazar Lomelín.

En ese marcó el presidente anunció la renegociación de los contratos con lo cual habla de un ahorro de 4,500 millones de dólares frente a estos personajes cuyo lenguaje corporal y expresión facial denotaban que estaban ocupando las sillas de acompañamiento al presidente en la mañanera muy distantes del mandatario, al verse forzados a un acuerdo que no se explicó en qué consistía, pero que además no implica que hasta el momento exista un desistimiento por parte de estos que demandaron al gobierno mexicano con las de ganar en un mediano plazo. Pero lo que importa es el negocio y aparentemente cedieron con el puño apretado.

Paralelamente a esto, expertos citados por medios nacionales como el universal hablan de que en realidad este acuerdo le saldría más costoso a los mexicanos, alrededor de un 40% más de lo pactado en los contratos originales, esto al modificarse dos factores: la extensión del plazo de 30 a 35 años de operación a las compañías contratantes así como la modificación de una tarifa que desde un principio será estable y no variable, a diferencia de lo previsto en el contrato original, lo cual según los expertos terminará por encarecer el servicio en el largo plazo.

Sin conceder que todo esto sea así en efecto por no disponer de los términos del acuerdo que después se reflejará en la renegociación de los contratos si en efecto se dan los desistimientos, podemos inferir que sería muy lamentable que por impericia, capricho u obstinación terminara saliendo más caro el caldo que las albóndigas, lo cual de verificarse en un futuro no muy lejano, sería una gran quemada para quienes han sido parte de este atorón, y lo peor, es que una vez determinados los términos y hecho entonces los cálculos, el anunciado ahorro de 4,500 millones de dólares terminara en un fiasco, por, según Urzúa y otros economistas, no entender el concepto y la aplicación de interés compuesto. Esperemos que no sea así y los expertos estén equivocados.

Bytheway

Me pregunto, qué hubiera pasado si en lugar de un mall en El Paso hubiera sido en algún balneario mexicano donde se perpetrara la masacre ,no de mexicanos, sino de turistas estadounidenses... De haber atrapado al psicópata responsable de estos hechos ¿No se los hubiésemos entregado inmediatamente a los gringos para su ajusticiamiento? Creo que si... De haber sido el Presidente mexicano el incitador, como ocurrió con el orate naranja, ¿Nos hubiera reconvenido la ONU y estuviera señalado de dictador y enemigo de la democracia? Creo que si... , ¿O, acaso nos hubieran invadido los marines para derrocar al hijo del diablo? Puede que... O en su defecto, ¿Estaría el gobierno gringo mandando una timorata carta a la OEA para pedir una condena a los acontecimientos sin señalar a los verdaderos responsables ni exigir su castigo? Yo creo que no... Pues eso último estamos haciendo.

Agradezco sus comentarios en @dparra001