Esta es la erupción solar más poderosa en siete años, desde que una ráfaga en septiembre de 2017 provocó apagones de radio durante horas.

PERO... ¿QUÉ ES UNA ERUPCIÓN SOLAR?

Las erupciones solares son explosiones gigantes en la superficie del Sol que liberan una gran cantidad de energía en forma de luz, calor y partículas. Se pueden observar como llamaradas brillantes en la superficie del Sol.

La mayoría de las erupciones solares son pequeñas y no tienen un impacto significativo en la Tierra. Sin embargo, las erupciones solares más grandes pueden tener efectos graves en nuestro planeta.

Entre los principales efectos que podemos observar en la Tierra destacan:

Interferencias en las comunicaciones: Las erupciones solares pueden interferir con las señales de radio y satélite, lo que puede afectar a las comunicaciones, la navegación aérea y el GPS.

Apagones eléctricos: Las más fuertes pueden inducir corrientes eléctricas en la Tierra que pueden causar apagones de electricidad.

Auroras boreales y australes: Son erupciones que pueden crear auroras boreales y australes, que son espectáculos de luces en el cielo nocturno.

LA IMPACTANTE LLAMARADA X

Las erupciones solares son 'poderosas ráfagas' de radiación de alta energía procedente de la superficie del sol que pueden provocar perturbaciones en la Tierra. Según la NASA, estas llamaradas y erupciones solares pueden afectar a las comunicaciones por radio, las redes eléctricas, las señales de navegación y suponer riesgos para las naves espaciales y los astronautas.

Esta nueva llamarada está clasificada como llamarada X, lo que significa que es el tipo más grande que puede provocar apagones de radio en todo el mundo y tormentas de radiación duraderas en la atmósfera superior.

NADA SIMILAR DESDE 2017

Un estudio publicado en la revista Space Weather concluyó posteriormente que las llamaradas de 2017 dañaron las comunicaciones por radio durante los esfuerzos de respuesta a los huracanes en el Caribe.

La erupción solar X6.3 de esta semana es también la mayor de las tres que han ocurrido desde el miércoles, según la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA).

Las partículas suelen tardar dos días después de que se ve la llamarada en el Sol para llegar a la Tierra. A su llegada, estas pueden dar lugar a una aurora, un espectacular destello de luces de colores vibrantes en el cielo visible cerca de los polos de la Tierra.

El impacto de esta erupción solar masiva está siendo monitoreado de cerca por los científicos y expertos en clima espacial. Mantente informado sobre cualquier actualización y precaución adicional que pueda ser necesaria a medida que estudiamos más a fondo los efectos de estos fenómenos solares en nuestro planeta.